Contacto

Donaciones e inversionistas

Productores y Emprendedores

Empresas

Gobierno

INUNDACIONES EN EL PILCOMAYO: IMPACTO Y RESPUESTAS EN LA REGIÓN

Río Pilcomayo vuelve con fuerza luego de 8 años y activa a más de 500 personas en la coordinación, comunicación y participación en el SAP

Luis María de la Cruz, responsable del Sistema de Alerta Pilcomayo ha remarcado que a diferencia de los últimos años, el río ha mostrado un comportamiento más activo, superando los 6 metros en varias localidades como Villa Montes, Bolivia. Este aumento no es aislado, sino parte de una onda decreciente significativa que ha afectado diversas áreas de la cuenca alta, en Bolivia, Paraguay y Argentina y se inició el 7 de marzo. «Hay mucha gente autoevacuada, que no se contabiliza a través de los organismos del Estado”, precisa de la Cruz.

En el caso del Paraguay la municipalidad de Mariscal Estigarribia ha declarado estado de Emergencia pero la desesperación de las familias y población se hace sentir a raíz de ingreso del agua a la comunidad de Pozo Hondo afectando incluso a la Base Naval paraguaya, sin que se haya logrado una respuesta inmediata del Estado.

Los desbordes han provocado cortes de caminos y aislado poblaciones enteras, afectando a sus sistemas de producción y viviendas. Aunque la situación era previsible debido a la creciente actividad del río, las respuestas de las autoridades son limitadas debido a las capacidades de los organismos involucrados. 

“El fenómeno del río Pilcomayo se caracteriza por una reducción significativa de pendientes, lo que facilita la erosión y el ensanchamiento del cauce. A lo largo de los últimos años, el río ha ganado mucho más terreno, afectando incluso a poblaciones históricas, como el paraje «Marca Borrada», que podría desaparecer debido al constante avance de las aguas. Esto también se ha visto en otras áreas, como San Luis, donde la erosión está llevando incluso viviendas y sistemas productivos enteros”, señala Luis María.

Luis también hizo hincapié en la importancia de revisar los niveles de alerta. Aunque históricamente un nivel de 3 metros en Villa Montes era señal de desbordes, este umbral ha disminuido, ocurriendo incluso en la zona hoy afectada con 2 metros de altura en Villa Montes. Este fenómeno es indicativo de que el lecho del río se ha elevado considerablemente, afectando tanto la magnitud de los desbordes como su capacidad de dispersión.

El Sistema de Alerta Temprana Pilcomayo es un sistema con características diferenciales con respecto a otros sistemas de alerta hidrológico conocidos en la región y en general en los tres países. El componente principal es el monitoreo colaborativo entre los organismos de los Estados y la población local, que es la que genera datos diferenciales, desde la experiencia en el territorio y a la vez quién se beneficia de la interpretación que un equipo de apoyo hace de los datos oficiales.

La importancia de la prevención y la gestión del riesgo hídrico

Para Redes Chaco el Sistema de Alerta Pilcomayo es una herramienta crucial para prevenir y gestionar las inundaciones en las zonas afectadas por el río Pilcomayo, que atraviesa regiones de Bolivia, Argentina y Paraguay. Este sistema tiene como objetivo proporcionar información precisa y oportuna sobre los niveles del río, ayudando a las autoridades locales y a la población a tomar medidas preventivas ante posibles desbordes o crecientes. El sistema se basa en el monitoreo constante del comportamiento del río, la recopilación de datos hidrométricos observados por los organismos oficiales en diferentes puntos a lo largo de la cuenca del Pilcomayo y la participación voluntaria de pobladores y pobladoras que constantemente envían información acerca de la evolución del río en las zonas de influencia de sus parajes y comunidades.

En los tres países es necesario una revisión profunda de las estrategias y conceptos manejados sobre la gestión del riesgo hídrico, atendiendo principalmente a la prevención. De otra forma, cada año que ocurra una creciente mayor, se estará respondiendo a las emergencias con precariedad, sin resolver problemáticas de fondo que pueden preverse con obras y organización suficientemente anticipada.  En este sentido, probablemente Formosa sea la única provincia afectada que ha podido mantener un criterio preventivo de largo plazo, a pesar de que los efectos de la creciente actual han superado estos esfuerzos en muchos sectores de la costa del bañado.